La importancia de la oscuridad
Sebas RevueltaEsta frase refleja la valentía que algunos deportistas muestran ante la adversidad.
Esta frase refleja la valentía que algunos deportistas muestran ante la adversidad.
El tenista profesional suizo Roger Federer, después de estar como número 1 del mundo durante más de 285 semanas, a solo una del récord absoluto en posesión del americano Pete Sampras, bajó su rendimiento y con ello su posición en el ranking de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP). Pocos apostaban por el suizo en aquellos momentos. De hecho, se rumoreaba su posible retirada y una nueva era en el tenis masculino con el español Nadal y el serbio Djokovic a la cabeza. Pero Roger, con 31 años y después de dos años de espera (junio 2010 a julio 2012) ha vuelto a ser el jugador de técnica exquisita que todos conocían y con ello han llegado los resultados. El 9 de julio de 2012 volvió a lo más alto del ranking, superando de este modo a Sampras.
El futbolista argentino Gonzalo Higuaín llegó con 18 años al Real Madrid en una operación en la que también se incorporaba a la disciplina del conjunto blanco su compatriota Fernando Gago. Durante cinco temporadas el “Pipa” Higuaín luchó por hacerse un hueco en la tan exigente plantilla del Real. Hace dos años tuvo que dejar de jugar por una grave lesión en la espalda, de la que se operó a principios del 2011. Estuvo varios meses de espera y recuperación, meses que pueden ser eternos para un futbolista que minuto a minuto tiene que demostrar su valía. Pero volvió. La temporada pasada marcó en liga 22 goles jugando la mitad de minutos que otros delanteros como Messi o Ronaldo.
El pasado mes de septiembre el ciclista español Alberto Contador se proclamó vencedor de la Vuelta a España 2012. Atrás dejaba un calvario en el que tuvo que dejar de competir durante varios meses por un caso de dopaje no probado y ver cómo se borraban de su palmarés, entre otras victorias, un Tour y un Giro. En esos meses de espera tuvo que ver un nuevo Tour y los Juegos Olímpicos por televisión y, por supuesto, entrenar en el silencio, en la oscuridad. «Lo pasado, pasado está», llegó a decir el de Pinto. Pero volvió y, aunque no fue fácil, se hizo con la victoria de la Vuelta en una memorable batalla con Valverde y Purito.
