Somos lo que comemos, pero también lo que respiramos, e inspiramos un aire muy contaminado que produce más de 30.000 muertes prematuras al año, el doble de lo estimado hace un década. Los informes sobre calidad del aire y salud son muy claros. El de Contaminación atmosférica en las ciudades 2019, de la Organización de Consumidores OCU, revela que las partículas en suspensión que penetran en nuestros pulmones superan los límites establecidos por la legislación de calidad del aire en Madrid, Valencia y Barcelona, siendo esta última la que presenta unos niveles más altos.
Tanto Madrid como Barcelona han vivido ya preocupantes picos de contaminación que han obligado a tomar medidas extraordinarias y restrictivas. Medidas aisladas. Para 2050 la Unión Europea quiere conseguir el objetivo cero emisiones netas. Para entonces, España busca ser totalmente renovable y haber reducido sus emisiones de carbono en un 90%. Estamos lejos de esa realidad, pero ¿algo está cambiando?
Leer más