–Alberto Chicote se define como...

–Un cocinero enamorado de su trabajo y de muchas otras cosas. No me gusta hacer las cosas a medias.

–Con 17 años comenzó sus estudios de cocina. ¿Cómo fue? –Un buen día el orientador del instituto me dijo que había escuelas de cocina y alta cocina. Me pareció tan atractivo que probé suerte en la Escuela de la Casa de Campo de Madrid. Acerté.

–Ha cumplido su sueño: tener su propio restaurante. En este, las mesas favorecen que los comensales se relacionen aunque no se conozcan... –Nunca fue mi sueño; es una especie de mal menor. Tener un restaurante en propiedad te otorga muchas satisfacciones, pero también te roba mucha energía para cocinar y crear.

–Imagino que no le pillaremos con la cocina sucia... –Las cocinas se ensucian y se limpian.

–En «Pesadilla en la cocina» han batido récords. Ya no sé si fiarme de los bares y restaurantes... –Hay infinidad de ellos que hacen un buen trabajo; esa es la lectura más adecuada. Ahora que sabes cómo funcionan las tripas de un restaurante, sabes que no es tan fácil como parecía...

–Hay quien dice que tiene “mala leche”. ¿Se identifica? –No; ocurre que me cabreo con cosas con las que otra gente no se enfada. El maltrato al producto o la falta de entrega en la cocina me encienden. Otros se cabrean si pierde su equipo.

–¿La alta cocina es sólo apta para bolsillos acaudalados? –La alta cocina no es la cocina cara; es la que más emociones te procura, y eso... no siempre es caro.

–La dieta mediterránea es la más rica. ¿Nos lo creemos? –La dieta variada es la mas rica y adecuada. Y en el Mediterráneo tenemos la fortuna de encontrar gran variedad de productos y cocinas. Es una maravilla.

–Ha sido premiado por su cocina “fusión”. ¿De dónde saca la originalidad? –De la necesidad de respirar aire fresco, de la inquietud por conocer y del ansia de disfrutar.

–¿Y en casa también cocina?

–Raramente. Paso muy poco tiempo en casa.

–¿Por qué los altos cocineros suelen ser hombres? –Hay grandísimas cocineras en este país y en otros. A mí me gusta mucho la cocina femenina; tiene un plus de sensibilidad que me emociona.

–«Pesadilla en la cocina», «Top chef»... ¡Hasta ha dado las campanadas! ¿Qué le ha aportado la TV? –Un plus de popularidad y la posibilidad de conocer a gente interesantísima a la que no conocía.

–Para Alberto Chicote lo importante en la vida es... –Que siga teniendo la capacidad de manejar lo que me ocurre y vivirla junto a los que quiero y me quieren.

–Un plato fresquito para el verano...

–El rey es el gazpacho, sin duda.